jueves, 28 de octubre de 2010

Y ser valiente, como Daniel lo fue.

Eran las seis de la mañana y Daniel se despertó sobresaltado. Esa noche había tenido un sueño extraño. Soñó con un lugar que no conocía, lejos de su trabajo, lejos de sus amigos de siempre, de su familia, de la mujer con la que llevaba compartiendo casi treinta años… Pero lo extraño es que allí era feliz. Increíblemente feliz. 

Y nada más despertase, se levantó de la cama y se dirigió al armario sin hacer a penas ruido. No quería despertar a Marta, que soñaba con no se sabe qué acurrucada en la cama. Sacó una maleta pequeña en la que metió poca ropa. Cogió dinero de la cartera y la metió en la maleta de mano. Apuntó dos números de teléfono en un papel y desconectó el móvil. En otro papel escribió:

No me esperes, no volveré. O al menos, no pronto.
Daniel.

Y lo dejó en la mesilla de su mujer.
Rápidamente salió por la puerta y corrió hacia el aeropuerto. “Un billete para un lugar que esté lejos, y que sea diferente” pidió a la azafata. Bali, en Australia le pareció el lugar adecuando. En dos horas subió al avión que le depararía a una nueva vida, lejos de todo. Sabía que nadie le entendería, y que lo juzgarían por marcharse así. Pero tenía cincuenta y tres años, odiaba la monotonía y llevaba treinta años atado a una vida que jamás hubiera imaginado, que no era la suya. “Yo no he nacido para esto” siempre se repetía. Y hoy, no se sabe por qué, escapó. 

Aún sentía miedo respecto a su decisión. Pero se daba cuenta de una cosa: las decisiones eran solamente el comienzo de algo. Y él había comenzado sonriendo.


A veces me gustaría ser tan valiente como Daniel, salir corriendo y dejar todo atrás, apartanto el miedo y lanzándome a la aventura. Pero nunca lo consigo. Quizá porque hay demasiadas cosas (sobre todo, demasiadas personas) que me retienen aquí.

Ah! Muchísimas gracias a Chica Gris   por el premio que me ha dado en su blog! (Un blog muy bonito, os lo recomiendo sin duda!)

sábado, 23 de octubre de 2010

Soledad y Depresión

Primero noto una presencia amenazadora y después me van rodeando Depresión a la izquierda, Soledad a la derecha. No hace falta que se identifiquen enseñándome su placa. Llevamos tiempo jugando al perro y el gato. Aunque admito que me sorprende encontrármelas aquí, al anochecer, en este jardín. La verdad es que no es su sitio.
-¿Cómo sabíais que estaba aquí? ¿Quién os lo ha dicho? -Les digo.
Depresión, que va de tía lista, me dice:
-¡Anda! ¿Es que no te alegras de vernos?
-Lárgate. -Le pido.
Soledad, que siempre hace de poli bueno, me replica:
-Lo siento señora, pero puede que la siga durante todo el viaje. Tengo órdenes.
-Pues prefiero que no, la verdad. -Contesto.
Soledad se encoge de hombros pero se me acerca más.
Entonces me cachean. Y me sacan de los bolsillos todo lo que pueda parecerse a la Alegría. Depresión incluso llega a robarme la identidad, su viejo truco de toda la vida. Después Soledad me interroga, cosa que aborrezco, ya que suele durar varias horas. Lo hace con educación, pero es implacable y siempre consigue ponerme del revés.
De vuelta a casa espero poder quitármelas de encima, pero van pisándome los talones las muy capullas. Depresión me agarra el hombro con firmeza y Soledad sigue dándome la vara con el interrogatorio. No me queda otra que saltarme la cena para evitar que me miren a los ojos mientras como. Procuro que tampoco me sigan escaleras arriba  hasta la puerta de mi piso, pero conociendo a Depresión, sé que lleva una porra, así que no puedo impedirle que entre si se empeña.
-No teneis ningún derecho a estar aquí. -Le digo a Depresión. -Ya he saldado mi deuda con vosotras.
Pero Depresión me dedica esa sonrisa tenebrosa suya, se acomoda en mi silla favorita, pone los pies encima de la mesa y enciende un cigarrillo, llenándome la casa de su humo espantoso. Sin quitarme el ojo de encima, Soledad suspira y se mete en mi cama vestida, con zapatos y todo, tapándose hasta el cuello. Voy a tener que compartir una vez más la cama con ella. Lo sé.


Pd: Este texto no lo he escrito yo, porque si ahora mismo tuviera que decir algo sobre mí.. sólo sabría decir que soy rara. Que no espero lo que cualquier chica de 16 años suele "querer". Así que me ha gustado y lo he sacado de Come Reza Ama, que es el libro que me estoy leyendo ahora. Buen finde a todos :)

sábado, 16 de octubre de 2010

One year ago

¿Por qué el tiempo pasa tan rápido? Es increíble, pero el tiempo vuela y ni si quiera te das cuenta.
No tengo nada de inspiración, pero algo me dice que es un buen día para escribir. Porque desde hace un año han pasado muchas cosas. Y cuando digo muchas, también quiero decir demasiadas
Este día, horas antes, los nervios no hacían más que inundar mi cuerpo cada vez más. Iba a verle de nuevo. Iba a confirmar si la locura que antes era nuestra, seguia siendo nuestra locura. Si a pesar de todo seguíamos teniendo esas ganas incontenibles de besarnos. Y claro que lo comprobé: todo eso se había terminado. Nada de lo que habíamos tenido, ninguna de nuestras risas, abrazos, bromas, juegos tontos, miradas que lo decían todo.. Nada. Ni un solo rastro de todo aquello. Se había esfumado, así, de un momento para otro. Y yo después de un viaje con intenciones de hablar no fui capaz de preguntar un por qué. Fui muy cobarde, ya sabeis, el típico miedo a quedar mal, a que esa pregunta no tuviera ninguna respuesta ni ninguna importancia para la otra persona. Y se acabó, así sin más, sin que nadie dijera nada. Pero las circunstancias dejaron todo claro y supongo que no hubo nada que aclarar.
Y después de eso seguimos manteniendo contacto, hablando de lo que nos echábamos de menos y de lo que nos gustaría volver a vernos, montando planes absurdos para poder pasar una noche más, o aunque tan solo fuera una tarde, pero de nuevo otra vez entre nuestros abrazos. Y nunca lo conseguimos. Porque en realidad la única que lo había intentado era yo. Pero llega un día en el que te das cuenta de que en esa pareja sólo quedas tú y que lo único que te ata a ello es esa herida. Y haciéndola sangrar no mantienes vivo su recuerdo, sinó el dolor de la pérdida. Y supongo que así acabó esta historia. Acostumbrada a que hablaramos una vez al mes (al menos) y ahora no sé cuando volveré a tener noticias suyas.. Y si volveré a tenerlas.. Y eso me hace preguntarme que pasaría si volvieramos a hablar.. Que sentiría yo.


Porque a veces se juntan dos ríos en las noches de diciembre, porque no sé de donde has salido, toda una vida sin verte..

jueves, 14 de octubre de 2010

Mi ABC

Abrazos y Amor 
Bombones chocobons y Besos apasionados
Corazón
Destino
El libro de la selva
Felicidad
Galletas rellenas de chocolate
Hakuna matata
Impaciencia
Jamón serrano
Kinder bueno
Locura
Miedo
Nocilla
Olvidadiza
Pancho y Pasión
Querer
Recuerdos que te hacen..
Sonreír siempre
Tuenti-adicta
Universidad de madrid
Vive y deja vivir
Wonderful life
Youtube
Zamora


Soy como todas las personas: veo el mundo tal como desearía que sucedieran las cosas, y no como realmente suceden.

miércoles, 13 de octubre de 2010

Sonrisa con oyuelo de mentira

Cuando enfrenta el otoño aunque pierda las hojas, recoge flores aunque tengan espinas y marca camino aunque se levante el polvo.
Eso lo haces tú.. por mucho que en un principio te de miedo, te resulten raras las cosas.. tienes el valor de seguir hacia delante pequeña.. y esa es una de las cosas que te hace especial.

viernes, 8 de octubre de 2010

Nunca me he sentido tan perdida..

                                         y a ti tan lejos de mi.

Es extraño. Todo ha cambiado últimamente de golpe. Cada día un cambio más brusco que el anterior, pero en realidad siempre acabo en el mismo lugar que siempre. Cuando creo que ya está todo claro, que sé lo que quiero, ocurre algo que pone todo mi mundo patas arriba y no sé ni si quiera quien soy ni qué quiero.
Empiezo a pensar que nada es para siempre. Ni si quiera una amistad de esas que meterías en el fuego no una mano, sino el cuerpo entero, por apostar que sería para siempre, pasara lo que pasara. Pero ya no estoy segura ni de que eso pueda ser para siempre.. Espero que sí, pero como he dicho, todo ha cambiado mucho. Quizá demasiado.


Y por supuesto, muchisimas gracias a Nicole, que me cree merecedora del premio blog&hearts :)


Normas de este premio:
-Hacer una entrada con el premio.
-Compartir con 12 bloggers, linkeándolos.
-Comentar en los blogs de las personas a las que has dado el premio y linkear a la persona que te ha dado el premio.

Y aquí os dejo mis 12 sensaciones:

Mi mundo perezoso


Muchos besos a tooooooodos, pasad muy buen puente y gracias :)

sábado, 2 de octubre de 2010

Sueños de almohada,

imágenes caprichosas que mezclan nuestros recuerdos, alborotan nuestra memoria durante noches y noches, horas y horas... Los sueños están ahí, cada noche, dentro de tu cabeza. Nadie puede verlos excepto porque son tuyos. Sin embargo no puedes controlarlos, dependen de sí mismos aunque se alimentan de ti, pero son simplemente sueños. En los sueños todo es posible: volar, amar lo odiado, vivir lo que nunca has vivido, morir y volver a nacer.. De los sueños puedes aprender, puedes olvidarlos.. Lo único que no debes hacer jamás es depender de ellos, porque los sueños no respetan la razón ni el sentido, por eso nadie debería entrar en los sueños de otro, nadie.


No hemos inventado nada nuevo, ni siquiera hemos aprendido a amar, estamos perdidos.. como en un sueño. El amor debería ser un milagro en el que soñamos la felicidad del otro. Por eso no creas nunca que el amor te pertenece, porque en ese preciso instante desaparecerá.. como un sueño, porque el amor es un sueño en el que sueñan dos.